miércoles, 19 de septiembre de 2012

Soy de las que necesita poner una pegatina a la sal y al azúcar para saber cuál es cuál, ¿tú no? Necesito saber diferenciar ambas cosas. Es extraño que esa necesidad se haya convertido en algo cotidiano. Lo ha hecho en forma de pregunta, en dos palabras entre interrogaciones. Me atormenta, ¿sabes? Me atormenta todos los días, a todas horas, esté donde esté, con quien sea. Disfruto del momento hasta que esa necesidad aparece. Luego se va y vuelve después. Es una pregunta que cuando pasas aparece, cuando caminas a mi lado o cuando me miras. Pero no sólo tú, me pasa siempre, con todo el mundo. Miro a la gente que me rodea a los ojos y esa pregunta aparece, la necesidad se hace tan fuerte que puedo incluso sentirla. No me deja ser feliz, no me deja disfrutar de las pocas cosas que parece que valen la pena. Esa pregunta es "¿qué somos?". ¿Tú nunca te has preguntado eso a ti mismo? No soy del tipo de personas que disfrutan, que se dejan llevar por la gente; mi "¿qué somos?" es tan grande que vive conmigo... en el azúcar y la sal.

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