martes, 22 de enero de 2013

¿Soy la única que piensa que a veces sí que es demasiado tarde? Estoy harta de que promulguen que nunca es tarde, o ese never too late que suena tan bien pero que cuenta la misma mentira. A veces  que es demasiado tarde, ¿o es que tú vas a esperar por siempre a la persona que te dejó años atrás? ¿O acaso vas a recibir con una sonrisa el perdón de aquella chica que esperabas hace veinte años? La vida es corta aunque pasemos por millones de experiencias. Eso implica que dejemos ciertas cosas atrás, incluso que dejemos en el pasado cosas por hacer. Sólo hay una cosa de los never too late que me atrae. La capacidad que tienen de poner tu mundo patas arriba en décimas de segundo. ¿Qué pasaría si tu amigo te traiciona y, quince años más tarde, te pide perdón? Que tus quehaceres diarios, tus salidas a correr a las nueve de la mañana los sábados y todo eso que ahora parecía tan trivial, cambia. Empiezas a pensar en los "¿qué pasaría si...?". Si le perdonase, si volviésemos a ser los Zipi y Zape que fuimos de pequeños... O también qué habría pasado si hubieses aceptado su perdón quince años atrás. Te rompen los esquemas. Pero supongo que ya es demasiado tarde para encontrarle alguna ventaja, ¿no?

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