lunes, 29 de abril de 2013

Queda poco tiempo. Ahora todo se reduce a eso. De pequeña me dediqué a pensar que la vida es larga, que está llena de cosas que vivir, de mundos que visitar y de gente que conocer. Pero no es así. Queda poco tiempo. Vuelvo a repetirlo. Hoy he caído en la cuenta de que apenas me quedan dos años para empezar la universidad. De que de pronto tengo que empezar a pensar en qué quiero ser, en quién quiero convertirme. O en quién podré convertirme, más bien. Queda poco tiempo. Repito de nuevo. Tengo dos años para ser alguien, para cerrar una etapa y madurar, hacerme alguien fuerte o alguien débil, alguien que valga la pena o alguien destinado a un futuro perecedero. ¿Quién soy? y ¿Quién quiero ser? Ahora todo va a basarse en eso, en eso y en quién he sido todo este tiempo; qué he hecho, a quién he podido conocer que me cambiase la vida y, no sé, en quién podía haberme convertido. Nos queda poco tiempo


"Si te sirve de algo, nunca es demasiado tarde o, en mi caso, demasiado pronto para ser quien quieres ser. No hay límite en el tiempo. Empieza cuando quieras. Puedes cambiar o no hacerlo. No hay normas al respecto. De todo podemos sacar una lectura positiva o negativa. Espero que tú saques la positiva. Espero que veas cosas que te sorprendan. Espero que sientas cosas que nunca hayas sentido. Espero que conozcas a personas con otro punto de vista. Espero que vivas una vida de la que te sientas orgullosa. Y si ves que no es así, espero que tengas la fortaleza para empezar de nuevo."
                                                                                                -El curioso caso de Benjamin Button.

No hay comentarios:

Publicar un comentario